Las recientes declaraciones de Mr. Obama luego de su encuentro con el presidente palestino Mahmoud Abbas, en Washington me enfrentaron al viejo Sócrates.Sucede que Sócrates ese baluarte fundador de la cultura occidental e indudable líder de la derecha en su tiempo y en cualquiera, siempre puso como centro de su sistema la ética entendida como el bien. Y ahí está el dilema: ¿cómo ¨cuadrar¨ las reflexiones de Mr. Obama con la ética socrática?
Sucede que Mr Obama se preguntó según la BBC: ¨¿cómo creamos un marco diferente para que la gente en Gaza pueda prosperar, y que los extremistas queden aislados (...); y cómo lo hacemos teniendo en cuenta además las legítimas preocupaciones de Israel sobre su seguridad ¨.
¿Habrá estudiado Mr. Obama algo de la compleja historia del resurgimiento del estado de Israel sepultado finalmente por los romanos antes de Cristo? ¿Alguien le habrá comunicado quiénes fueron desde el propio surgimiento de ese estado los violadores de los propios acuerdos fundacionales de la ONU? ¿Conocerá que una cosa es el noble pueblo hebreo y otra el sionismo?
Creo que definitivamente el buen Sócrates tendrá que mirar con tristeza a Mr. Obama. Este no clasifica ya en el campo de los líderes casados con la ética y el bien, si no con la falsedad y el amago de guerra que es lo que significa, en la práctica, defender el sionismo reinante ahora en Israel.
